domingo, 1 de septiembre de 2024

“Pongan en práctica la Palabra y no se contenten solo con oírla, de manera que se engañen a ustedes mismos” (Santiago 1,22). Palabra del Mes. Septiembre 2024.

“Pongan en práctica la Palabra y no se contenten sólo con oírla, de manera que se engañen a ustedes mismos” (Santiago 1,22)

El de la escucha y la práctica es un tema fundamental sobre el que insiste el autor del versículo de este mes. En efecto, la carta prosigue: 

“En cambio el que considera atentamente la Ley perfecta, que nos hace libres, y se aficiona a ella, no como un oyente distraído, sino como un verdadero cumplidor de la Ley, será feliz al practicarla” (Santiago 1,25).  

Y es precisamente este compromiso por conocer sus palabras y vivirlas lo que nos hace libres y nos da alegría.

Podría decirse que la frase bíblica de este mes es de por sí el motivo mismo de la práctica de la Palabra de Vida difundida en todo el mundo. Una vez por mes, Chiara Lubich elegía una frase de la Escritura y la comentaba. En encuentros posteriores se compartían los frutos de lo que había trabajado a través de las experiencias de vida y se iban creando comunidades que mostraban en germen los reflejos sociales de los que era capaz.

“A pesar de su simplicidad, la iniciativa ofrecía una notable contribución para redescubrir la Palabra de Dios en el mundo cristiano del siglo XX”[1], 

transmitiendo un “método” para vivir el evangelio y compartir sus efectos.

“Pongan en práctica la Palabra y no se contenten sólo con oírla, de manera que se engañen a ustedes mismos”.

La carta de Santiago retoma lo que Jesús anunció para vivir y experimentar la realidad del Reino de los cielos entre nosotros: declara feliz a quien escucha la Palabra de Dios y la practica[2], reconoce como madre y hermanos suyos a quienes la escuchan y la ponen en práctica[3], la compara con la semilla que, si cae en tierra fértil, es decir en quienes la escuchan con un corazón bien dispuesto, la retienen y dan fruto gracias a su constancia[4].

“En cada palabra suya, Jesús expresa todo su amor por nosotros –escribe Chiara Lubich– y podemos encarnarla y hacerla propia para experimentar qué potencia libera al ser vivida en nosotros y entre nosotros. Podemos enamorarnos del evangelio hasta dejarnos transformar en él y derramarlo sobre los demás. Probaremos la libertad de nosotros mismos, de nuestros límites, de nuestras esclavitudes, y además veremos surgir la revolución del amor que Jesús, al estar libre para vivir en nosotros, provocará en el tejido social en el que estamos inmersos”[5].

“Pongan en práctica la Palabra y no se contenten sólo con oírla, de manera que se engañen a ustedes mismos”.

¿Cómo poner en práctica esta Palabra? Miremos a nuestro alrededor y pongámonos al servicio de quienes están necesitados, con pequeñas o grandes señales de cuidado recíproco para transformar las estructuras injustas de la sociedad, contraponiéndose a la violencia, favoreciendo gestos de paz y de reconciliación, creciendo en la sensibilidad y en las acciones en favor de nuestro planeta.

Una auténtica revolución irrumpe así en nuestra vida y en la comunidad donde vivimos, en el ambiente de trabajo donde actuamos.

El amor se manifiesta en las acciones sociales y políticas que tratan de construir un mundo mejor. Del compromiso de una pequeña comunidad de los Focolares encaminada a las personas más frágiles, nació en Perú un centro para ancianos en la localidad de Lamud, una ciudad de la Amazonia peruana, a 2.330 metros sobre el nivel del mar. El centro fue inaugurado en plena crisis por la pandemia y alberga a cincuenta personas mayores y solas. La casa, los muebles, la ropa de cama y también la comida llegaron como ofrecimiento de la comunidad cercana. Fue un desafío no exento de dificultades y obstáculos, pero en marzo de 2022 se celebró su primer aniversario abriendo las puertas para una fiesta con la ciudad, donde participaron también las autoridades. Fueron dos días de festejos que permitieron sumar nuevos voluntarios, adultos y jóvenes, que quieren ocuparse de los abuelos que están solos, ampliando así sus propias familias.

Patrizia Mazzola y equipo de Palabra de Vida

NOTAS

[1] Lubich C., Palabras de Vida, editado por Fabio Ciardi en 2017.

[2] Cf. Lucas 11,28.

[3] Cf. Lucas 8,21

[4] Cf. Lucas 8,15

[5] Lubich C., Palabra de Vida, septiembre 2006.

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